Ya tenemos gobierno nuevo y conocemos a sus miembros, sus rostros y sus méritos o desméritos anteriores, yo tengo algunas reservas, quizás infundadas, pero ciertamente instintivas y últimamente es el instinto mi mejor baza.
Rajoy como presidente lo encuentro contento, salido, se le escapa entre la barba una sonrisa picarona, lo encuentro muy ordenado y con ganas de hacer cosas, su método de trabajo puede funcionar dentro del orden, falta ver como reacciona dentro del caos, por lo demás tiene los objetivos claros pero tengo mis dudas en cuanto a conseguir el fondo.
A Soraya y al equipo mas cercano de Rajoy, le pasa lo mismo, son gente estudiada con cierto fondo intelectual y político y se le nota desbordados de contentos por su papel en la historia inmediata de España. A ver que tal.
El resto del equipo, ahí están, se han olvidado de la paridad y de los records y han optado por los técnicos de grandes empresas, lo cual puede que este bien, yo personalmente hecho en falta un perfil mas político de los ministros, a favor esta su experiencia, pero están faltos todos de realidad social, y eso, en esta situación nos es bueno. Quiero decir que si este gabinete fuera francés o alemán, seria fantástico, pero estamos en España y tengo una sensación extraña a la vez que profunda de que nuestros ministros rara vez en su vida han pisado el suelo, nuestro suelo, el primero antes de ningún peldaño, y eso no es bueno.
Los problemas están en la tierra y no en cielo, es necesario mantener el espíritu y los objetivos claros y comenzar con los problemas de la tierra para luego ir subiendo, la verdadera salida del atolladero en el que estamos inmersos esta en los niveles más bajos, cualquier derrotero o perdida de esfuerzos en las nubes no dejaran de ser pájaras mentales y elucubraciones para el negocio de la prensa.
A ver que pasa.